Al final del túnel siempre hay claridad en la fiesta brava ecuatoriana
Sección: Noticias
En la incertidumbre, desazón y molestia por la desaparición de la empresa que es dueña de la Plaza de
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Toros Quito y su nula presencia respecto a una utópica Feria Jesús del Gran Poder 2013, la numerosa familia taurina ecuatoriana está semana ha recibido dos magníficas noticias que pese a la amargura de Quito en algo ha hecho aliviar el sinsabor.
Mencionadas noticias son tres magníficos mano a mano, dos en Latacunga en el mes de Noviembre y uno en Tanicuchí en Agosto.
Los olé de Iñaquito fueron, son y serán patrimonio de la capital ecuatoriana, en 2012 las aposentadurías del coso más importante del país quedaron en un velorio absoluto, sin actividad y con la interrupción de 51 años de actividad ferial, varios fueron los motivos para este cruel detonante.
Aquellos olé que no estuvieron en Quito, a lo largo de estos meses de agonía se han traslado a incontables plazas del Ecuador, entre tantas malas noticias hay positivas, el aumento de fiesta brava en pueblos, cantones y provincias que han visto en la tauromaquia una expresión cultural necesaria para sus diferentes festividades, lugares como: Latacunga, Riobamba, Machachi, Ambato, San Miguel de Bolívar, Mocha, entre otras han derramado arte, afición y optimismo en tan duros momentos.
Precisamente Latacunga, bajo la tutela de la empresa Triana, encabezada por José Luis Cobo ha organizado desde 2011 festejos como exige la afición taurina ecuatoriana, es decir con toros bien presentados, que cuentan con: peso, edad y trapío, a eso se le añade carteles atractivos con figuras del escalafón mundial.
En aquel año fue un mano a mano entre el maestro Víctor Méndez, muy querido en nuestro país y Finito de Córdoba, aquella tarde el resultado artístico fue memorable.
En el obscuro 2012 y en medio del dolor por la negativa de Citotusa en realizar el ciclo quiteño, llegaba el 30 de noviembre, la tarde del año, el día añorado, San Isidro Labrador en Latacunga se llenaba hasta la bandera, con la expectativa de revivir lo que se veía en Iñaquito años atrás, el diestro Julián López “El Juli” nos daba un capotazo en pro de la fiesta, aceptaba el venir a estoquear 4 reses en una encerrona que quedó para la historia, donde el madrileño nos hizo soñar despiertos, no solo por haber cortado 5 orejas y un rabo, si no por el fervor de lo hecho en el ruedo, donde el maestro se rompió y según sus propias palabras tuvo una de sus mejores tardes a lo largo de sus 16 años de alternativa,
El Juli revivió el toreo en Ecuador, con su poderío abstractamente dejó un mensaje “En Ecuador hay afición, solo falta dedicación por parte de quienes tienen facultades y el poder para elaboración de festejos.”
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Mencionadas noticias son tres magníficos mano a mano, dos en Latacunga en el mes de Noviembre y uno en Tanicuchí en Agosto.
Enteres de este interesante analisis sobre la fiesta en Ecuador.............
Los olé de Iñaquito fueron, son y serán patrimonio de la capital ecuatoriana, en 2012 las aposentadurías del coso más importante del país quedaron en un velorio absoluto, sin actividad y con la interrupción de 51 años de actividad ferial, varios fueron los motivos para este cruel detonante.
Aquellos olé que no estuvieron en Quito, a lo largo de estos meses de agonía se han traslado a incontables plazas del Ecuador, entre tantas malas noticias hay positivas, el aumento de fiesta brava en pueblos, cantones y provincias que han visto en la tauromaquia una expresión cultural necesaria para sus diferentes festividades, lugares como: Latacunga, Riobamba, Machachi, Ambato, San Miguel de Bolívar, Mocha, entre otras han derramado arte, afición y optimismo en tan duros momentos.
Precisamente Latacunga, bajo la tutela de la empresa Triana, encabezada por José Luis Cobo ha organizado desde 2011 festejos como exige la afición taurina ecuatoriana, es decir con toros bien presentados, que cuentan con: peso, edad y trapío, a eso se le añade carteles atractivos con figuras del escalafón mundial.
En aquel año fue un mano a mano entre el maestro Víctor Méndez, muy querido en nuestro país y Finito de Córdoba, aquella tarde el resultado artístico fue memorable.
En el obscuro 2012 y en medio del dolor por la negativa de Citotusa en realizar el ciclo quiteño, llegaba el 30 de noviembre, la tarde del año, el día añorado, San Isidro Labrador en Latacunga se llenaba hasta la bandera, con la expectativa de revivir lo que se veía en Iñaquito años atrás, el diestro Julián López “El Juli” nos daba un capotazo en pro de la fiesta, aceptaba el venir a estoquear 4 reses en una encerrona que quedó para la historia, donde el madrileño nos hizo soñar despiertos, no solo por haber cortado 5 orejas y un rabo, si no por el fervor de lo hecho en el ruedo, donde el maestro se rompió y según sus propias palabras tuvo una de sus mejores tardes a lo largo de sus 16 años de alternativa,
El Juli revivió el toreo en Ecuador, con su poderío abstractamente dejó un mensaje “En Ecuador hay afición, solo falta dedicación por parte de quienes tienen facultades y el poder para elaboración de festejos.”
Lo que se vivió en Latacunga seguramente quedará impregnado el resto de nuestras vidas, esa sensación de embrujo se puede repetir en 2013, la gestión del empresario, torero, ganadero y por sobre todas las cosas aficionado en armar un ciclo taurino a finales de año con figuras del orbe mundial como: Ponce, Juli, Padilla y Fandi, distribuidos en dos mano a mano el próximo 29 y 30 de noviembre nos da la sensación de hipnosis y una alegría difícil de expresarse mediante estas sentidas líneas.
Desde ya soñamos con el viernes 29 de Noviembre, esperaremos con ansias que en aquella fecha el reloj marque las 15H30 y que la puerta de cuadrillas se abra para ver en acción a El Juli y a Juan José Padilla, además nos ilusionamos todos con observar el sábado 30 del mismo mes a las 12H30 al maestro Enrique Ponce y a David Fandila “El Fandi.
Estos fantásticos mano a mano tendrán como protagonista al referente en la tauromaquia, al toro bravo, las divisas de Huagrahuasi y Triana que son sinónimos de garantía y excelencia de seguro no nos defraudarán.
Falta cuatro meses para que los caminos conduzcan a San Isidro Labrador, pero a lo largo de estas semanas en las tertulias taurinas uno de los tantos temas sin duda será los mano a mano en la cumbre del toreo.
A todo esto, los aficionados taurinos en el país tendremos en nuestro calendario la obligación de acudir a Tanicuchí, en la provincia del Cotopaxi a casi una hora de trayecto desde Quito, en aquel lugar se efectuará un mano a mano con: Juan Diego y Martín Campuzano ante reses de Santa Coloma y Peñas Blancas con una estampa impresionante, característicos de estos míticos bureles.
Vida Larga fue aquel toro de Santa Coloma que en la Feria de Quito del año 2003 permitió al de Salamanca realizar la mejor faena de aquel ciclo, Juan Diego nos dejó ver a un torero con estilo propio, valor inalcanzable y torería abrumadora, tan bien estuvo que el año siguiente repitió en Iñaquito.
Vuelve a vestirse de luces en nuestro país al cabo de 9 años, más maduro, con el aditamento de haber conquistado a “Las Ventas” y ganado el ciclo isidril años atrás, seguramente saldrá a por todas y el refrán del vino volverá a recitarse: “Entre más añejo, mejor”.
Martín Campuzano, uno de nuestros créditos ya toreó este encaste en 2009, lleva casi 5 años de alternativa y a lo largo de este tiempo nos ha regalado varias tardes de valor y torería, de seguro en Tanicuchí saldrá como un gallo a dejar la bandera tricolor en lo más alto y a no dejarse ganar la pelea con el salmantino.
Desde ya soñamos con el viernes 29 de Noviembre, esperaremos con ansias que en aquella fecha el reloj marque las 15H30 y que la puerta de cuadrillas se abra para ver en acción a El Juli y a Juan José Padilla, además nos ilusionamos todos con observar el sábado 30 del mismo mes a las 12H30 al maestro Enrique Ponce y a David Fandila “El Fandi.
Estos fantásticos mano a mano tendrán como protagonista al referente en la tauromaquia, al toro bravo, las divisas de Huagrahuasi y Triana que son sinónimos de garantía y excelencia de seguro no nos defraudarán.
Falta cuatro meses para que los caminos conduzcan a San Isidro Labrador, pero a lo largo de estas semanas en las tertulias taurinas uno de los tantos temas sin duda será los mano a mano en la cumbre del toreo.
A todo esto, los aficionados taurinos en el país tendremos en nuestro calendario la obligación de acudir a Tanicuchí, en la provincia del Cotopaxi a casi una hora de trayecto desde Quito, en aquel lugar se efectuará un mano a mano con: Juan Diego y Martín Campuzano ante reses de Santa Coloma y Peñas Blancas con una estampa impresionante, característicos de estos míticos bureles.
Vida Larga fue aquel toro de Santa Coloma que en la Feria de Quito del año 2003 permitió al de Salamanca realizar la mejor faena de aquel ciclo, Juan Diego nos dejó ver a un torero con estilo propio, valor inalcanzable y torería abrumadora, tan bien estuvo que el año siguiente repitió en Iñaquito.
Vuelve a vestirse de luces en nuestro país al cabo de 9 años, más maduro, con el aditamento de haber conquistado a “Las Ventas” y ganado el ciclo isidril años atrás, seguramente saldrá a por todas y el refrán del vino volverá a recitarse: “Entre más añejo, mejor”.
Martín Campuzano, uno de nuestros créditos ya toreó este encaste en 2009, lleva casi 5 años de alternativa y a lo largo de este tiempo nos ha regalado varias tardes de valor y torería, de seguro en Tanicuchí saldrá como un gallo a dejar la bandera tricolor en lo más alto y a no dejarse ganar la pelea con el salmantino.
Una fecha histórica para nuestro país, un 10 de Agosto, pero de 1809 se daba el primer grito de la independencia, ahora este mismo día pero de 2013 seguro quedará marcado en la afición taurina del país, como un día en el cual la hermosa y coqueta Plaza de Toros de Tanicuchí albergará una corrida para recordarla siempre.
No solo Latacunga y Tanicuchí tendrán actividad: Machachi, Riobamba, Salcedo y varios cantones de nuestro país preparan varias sorpresas que serán anunciadas en las próximas semanas, sin lugar a duda elogiaremos a quienes lleven encaminado de manera acertada estos festejos que no hacen más que alimentar a la afición.
No solo Latacunga y Tanicuchí tendrán actividad: Machachi, Riobamba, Salcedo y varios cantones de nuestro país preparan varias sorpresas que serán anunciadas en las próximas semanas, sin lugar a duda elogiaremos a quienes lleven encaminado de manera acertada estos festejos que no hacen más que alimentar a la afición.
Había tan solo que despertar al león dormido para que ruga nuevamente e imponga presencia, lamentablemente propios y extraños nos hicieron mucho daño y claro está, quedamos muy afectados, pero con la convicción de recuperar terreno perdido, de apelar a la sensatez y de volvernos a unir como en aquellas tardes en la Plaza Grande, en las calles del centro de Quito, en la inauguración del Estadio Atahualpa, que se inauguró con toros, en la mágica Belmonte, en la tan extrañada Monumental Iñaquito, en la Raúl Dávalos o en la San Isidro Labrador.
Esa unión de seguro se verá en las siguientes fechas del calendario taurino en nuestro país, porque Ecuador tiene afición, cuenta con personas que dignifican la fiesta y que la defienden a capa y espada.
Fuente: Emilia Arellano
Fuente: Emilia Arellano
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