sábado, 29 de mayo de 2010

LAS CORNADAS MIDEN LA CAPACIDAD DE UN TORERO CUANDO COMIENZA EN UN ANTES Y UN DESPUES


Se considera que la carrera de un torero no comienza hasta a partir de haber sufrido su primera cornada.

-"Es muy cierto que: No pocas veces es posible pronunciarse sobre el porvenir de un torero, hasta que este no haya sufrido su primera cornada más o menos seria, puesto que la misma será el punto de partida de su verdadera carrera-“. También es cierto, que quienes han resistido, quienes han dominado sus miedos, quienes son capaces de olvidar que un día y otro fueron zarandeados, volteados de mala manera campaneados o corneados de más o menos consideración, son aquellos que, tienen asumido, que una tarde cualquiera puede llegar la cornada. También es cierto que entre los toreros unos se duelen más que otros, en esos momentos de angustia y sufrimiento. – Claro que, algunos conocemos, que han hecho la carrera sin apenas percances, lo cual ha sido una excepción -.

La cornada para un torero, es sin duda la búsqueda del equilibrio, es lo que será el antes y el después de caer herido. La cornada, te para en seco, y te obliga a reflexionar sobre el porqué de lo ocurrido, a recapacitar, a pensar y decidir sobre los errores y desaciertos cometidos, no tan solo esa tarde, sino también en otras en que estuvo a punto de ser cogido. Pero sabe además el torero, que ha elegido una profesión de riesgo, y que la cornada es el tributo del triunfo, es el pago al contado con sangre propia, que siempre se mantiene en el recuerdo, porque en esa esencia de riesgo y emoción se sustenta la fiesta.

La carne desgarrada de la herida, la zurció el "galeno", pero el torero mira su traje destrozado, hecho jirones, inservible y se pregunta sobre los avatares y zozobras que ha de pasar antes de nacer a la fama, la gloria y el reconocimiento, incluso cuando esta ya se ha logrado, el paréntesis hospitalario dibuja un mapa de contenida rabia e incertidumbre. ¡Ahora que estaba en mi momento dulce, y estar en todas las ferias!, se lamenta: Está seguro de su curación, de su temple, no sabe cuando le darán el alta, pero ha de estar preparado. No es el gesto tan solo de un joven torero. Es un gesto natural de un torero de casta, y pocos de estos se duelen de sus heridas, de sus insomnios, de los zarpazos de la fiebre. Todos cuando caen heridos en el ruedo hacen el mismo y triste comentario. 
"Voy a estar sin torear..." El más grave daño es ese, no poder torear en un tiempo. Lo están llevando a la enfermería y su pensamiento ya va dando tumbos, girando alrededor de la amenaza siempre terrible para un torero de casta. ¿Cuánto tiempo estaré sin poder torea

miércoles, 26 de mayo de 2010

FABIO CASTAÑEDA TRIUNFADOR EN NIMES FRANCIA Y GANA TRAJE DE LUCES EN LA FINAL DEL LAS ESCUELAS TAURINAS


el 25/05/2010 9:30:00 (107 lecturas)
FAbio Castañeda farol

INFORMA CÍRCULO TAURINO AMIGOS DE LA DINASTÍA BIENVENIDA



Con gran satisfacción informamos que el novillero venezolano, Fabio Castañeda, alumno de la Escuela de Tauromaquia "Marcial Lalanda" de Madrid, ha obtenido un gran éxito al erigirse como ganador del

I MÁSTER INTERNACIONAL DE ESCUELAS TAURINAS DE NIMES

EL VENEZOLANO FABIO CASTAÑEDA GANA EL I MASTER INTERNACIONAL DE NIMES

Castañeda gana el Máster de Nîmes

Con gran satisfacción informamos que el novillero venezolano, Fabio Castañeda, alumno de la Escuela de Tauromaquia "Marcial Lalanda" de Madrid, ha obtenido un gran éxito al erigirse como ganador del I Master Internacional de Escuelas Taurinas en el el Coliseo de Nimes -Francia.

El joven tachirense, iniciado en la Escuela Taurina "César Faraco" de San Cristóbal, está cumpliendo el segundo curso en la escuela madrileña, donde logró matricularse en virtud de un acuerdo de colaboración entre nuestro Círculo Bienvenida, las citadas escuelas, y la Cátedra de Tauromaquia "G. Briceño Ferrigni" de la Universidad d elos Andes, de Mérida.

Nimes 24/05/2010.- 00:51
El novillero Fabio Castañeda ha ganado el Máster de Escuelas Taurinas, cuya final se ha celebrado esta noche en Nïmes. El joven aspirante ha paseado una oreja del quinto, al igual que Jesús Chover y Luis Gerpes.

--Erales de El Freixo. El 4º premiado con la vuelta al ruedo.

Jesús Chover, saludos tras aviso y oreja.

Fabio Castañeda, saludos tras dos avisos y oreja.

Luis Gerpes, vuelta tras dos avisos y oreja tras aviso.

El novillero Fabio Castañeda, como Triunfador del Master, he recibido como premio en un traje de luces, otorgado por la Fundación Internacional “El Juli”, además de un Premio a la Mejor Proyección que consistirá en su debut con picadores y apoyo a su carrera profesiona

PADILLA DEJO SABOR CON LA ZURDA CON LOS SAMUEL FLORES HOY EN MADRID



Juan José Padilla toreando al natural hoy en Madrid/Foto: Cabrera
MARIO JUÁREZ | Las Ventas 
A la corrida de Samuel le costó romper. Tanto, como tres toros. Los tres primeros, cada uno en su aire, mansearon demasiado, asomaron con el depósito de casta bajo mínimos y convirtieron la primera parte de la corrida en un espectáculo pesado y mecánico.
El toro que abrió plaza, estrechísimo y chico, se tapaba sólo por la cara. El toro apoyaba mal, blandeó en exceso y le recriminaron no pocas veces. Padilla se lo sacó en un largo inicio de faena y se puso por las dos manos, pero el animal no quería y no podía.
El segundo, para Encabo, huyó lo que no está en los escritos. Doscientos capotazos le dieron al toro y no consiguieron fijarlo. Tampoco Encabo, que dejó que se fuera a toriles y allí trató de pegarle un par de series sobre la diestra, aprovechando el viaje y la inercia. Antes había sufrido un desarme con la zurda. Y mató horrorosamente mal, como haría después a su segundo.
De los tres primeros, el de Iván García fue el que más se dejó, o el que al menos aguantó un poco. El toro era noblón, aunque se defendía y tomaba los engaños por arriba. Tras un buen inicio por bajo, el madrileño se puso por la diestra, donde llegó una serie buena. Al hilo, tratando de ganarle la acción en el segundo muletazo. Pero ahí terminó todo. El de Samuel se fue aplomando y el ánimo del de Móstoles también, que no terminó de confiarse ni de ponerse de verdad. Y también dejó una estocada en los blandos.
La tarde cambió de signo con el cuarto, un toro muy largo y ofensivo por delante, muy en Gamero. El de Samuel se dejó pegar con fijeza y Padilla, que salió a recibirlo con largas de rodillas, dio orden de que no lo pegasen. Había visto al toro.
El de Samuel se desplazó bien por el pitón izquierdo. Se movió más que los tres primeros y tomó los engaños por abajo. Tenía tendencia a salir suelto, pero Padillaestuvo muy habilidoso para ganarle la acción, buscarle para el siguiente muletazo y echársela al hocico.
Juan José sorprendió en Madrid. Un toro le permitió torear y el jerezano se templó. A gusto, toreando con poso, le cuajó tres series buenas de verdad con la zurda. En el terreno y la distancia que marcaban el de Samuel, que era la segunda raya. Provocándolo, trayéndoselo y soltándolo largo y atrás. Con limpieza y temple.
La gente entró con él en la faena y llegaron a pedirle la oreja. Pero la estocada, mortal de necesidad, viajó abajo. Quizá sea el argumento para denegarle el trofeo. Padilla,muy consciente del reto que suponía tornar las lanzas en cañas, cumplió con una calurosísima ovación y decidió no dar la vuelta al ruedo. Cosas de la madurez, que también enseña.
El quinto fue el más hondo y cuajado de la tarde.
El toro, que manseó lo suyo, tuvo guasa y salió siempre desentendido y frenándose, sin terminar de pasar. No ayudó a ello que Encabo no lo viese y no se pusiese en una faena en la que le enganchó mucho la tela y en la que no supo cómo meterle mano al toro. Se dobló y volvió a dejar un rosario de pinchazos bajos. Mal.
El sexto fue otro toro bueno, también por el pitón izquierdo. Iván García inició de nuevo doblándose la faena y se lo sacó afuera, donde el de Samuel embistió. Pedía sitio y se lo dio el madrileño, que sin embargo no se convenció de la cosa hasta el final de su faena. Empezó a tomarle el pulso cuando el de Samuel había regalado ya un puñado de embestidas por la zurda, sin que aquello explotase, que fue a mitad del lío.
Cuando la plaza ya estaba metida en la faena, Iván cambió de mano y volvió a la diestra, donde el toro no iba ni quería tanto. Se cayó a plomo la cosa. Y no fue hasta después de coger la espada cuando volvió a ponerla por la zocata... y el toro embistió por abajo y bien. Esa serie fue la mejor, y fue buena de verdad, pero llegó cuando el tren sólo dejaba ver el vagón de cola. 

MADRID, 26 DE MAYO

20ª de San Isidro. Lleno.

Un toro de 
Manuel Agustina López Flores (1º), terciado, flojo y manejable. Y tres deSamuel Flores (2º, 3º y 4º). Manso el 2º. 3º manso pero manejable. 4º de buen juego. 5º complicado. 6º noble y de buen juego.
Juan José Padilla, silencio y saludos tras petición.Luis Miguel Encabo, silencio y silencio.Iván García, silencio y palmas tras aviso.

TARDE DE ESPECTACION TARDE DE DESECCION AYER EN MADRID


El Juli salva los muebles y Perera se hace pesado
El Juli realizó con el de La Quinta lo más destacable de la tarde/Foto:Iván de Andrés
MARIO JUÁREZ

La corrida de la Prensa, incrustada en el abono, fue la de más glamour de la feria. O eso pensarían aquellos que se dejan ver y a los que les va la vida en una foto. Mucho vip, o gorrón, que en el toreo es lo mismo, por metro cuadrado. A rebufo de Cayetanoy su nombre acudieron muchos "guapos y guapas" que no se dejan ver más que el día D y la hora H.
Supone uno que los del clavel, que vinieron con la intención de disfrutar del arte torero del de dinastía, se estarán abriendo en canal las venas. Seguir y defender a este torero va a ser misión más imposible que las de Tom Cruise. Porque no está, y cuesta pensar en esperarle. Después de unos años de vueltas por España, tocaba dar la cara. Ya no hay excusas.
Cayetano le embistieron los dos toros. El de Domingo Hernández, muy suelto de carnes y con kilos pero muy agradable, y el de Toros de Cortés, un toro cornipaso pero sin cara, que no asustaba porque daba las palas que no las puntas, y que protestaron con razón. ¿A quién querían tomar el pelo embarcando eso?
Cayetano naufragó desde el minuto 1. Con el de Domingo Hernández, que embistió bien y por abajo, no fue capaz de plantear una faena. Cambiando terrenos, por aquí y por allá, citando en Cuenca, perdiendo pasos y con torpeza, con tirones, enganchones y sin recursos. El toro, si le quieren poner defectos, sería un punto informal. No de malo, sino de ir enganchado. El toro pedía toque, mando y que lo llevasen con firmeza. Nada de eso hubo en el naufragio cayetanista.
Para colmo, también embistió el sexto. El de Toros de Cortés estaba muy justo de fuerzas pero fue el de mejor son y condición de la tarde. De dulce. Ideal para un torero de arte y con temple en las manos. Lo vio muy claro El Juli, que quitó por chicuelinas y se lo enseñó al torero. Cayetano pasó otro rato sin ideas. A tirones unas pocas veces, con dudas otras, fuera de cacho por sistema. Imagen de novillero sin recursos.
Tampoco salvó la papeleta Perera. El extremeño se puso pesado con un inválido deCuvillo, que no podía con los cuartos traseros y con el que pasó un rato en la cara ante la desesperación general. La imagen que dio en el quinto fue, todavía, de mayor empecinamiento y tozudez.
El toro de El Ventorrillo, serio y bien hecho, quiso embestir. Tuvo treinta arrancadas buenas, de las de llevarlo y ayudarle, pero Perera se puso machachón desde el minuto uno, comenzó con banderazos por arriba y después lo quiso amarrar en corto y siempre por abajo, exigiendo al toro, que no estaba sobrado de fuerzas aunque quería embestir. Falto de temple, Miguel Ángel no le cogió el punto, dejó tropezar las telas varias veces -cierto es que el animal a veces pegó un disparo en la embestida-, tuvo que perder pasos y después de dos series de buen inicio, la cosa cayó en picado y sin freno. Necesita recuperar la frescura a la de ya.
Así las cosas, el único que superó la papeleta fue El Juli. Con dos toros de irreprochable trapío y cuajando a uno de La Quinta con nobleza y celo pero al que le faltó más raza. Julián, que tuvo que aguantar los insultos de siempre desde el minuto uno, se puso a torear a gusto, lo entendió y midió a la perfección, lo ayudó en línea de inicio para cuajarlo después en series muy importantes en redondo.
Se gustó y se le vio a gusto a El Juli, que dejó remates de repertorio: uno de las flores, algunas trincherillas, un cambio de mano, de pecho templadísimos... No remató, sin embargo, con la espada, que se le atascó en los dos toros. El de Victoriano del Río,bajo pero muy hondo, no quiso embestir. Venido a menos el animal, intentó pegarle pases al borrico, al que el ínclito Martínez que hace años le birló la segunda oreja hoy le obligó a entrar por tercera vez al caballo. No había donde rascar.

LAS VENTAS, 25 DE MAYO

Corrida de la Prensa. Lleno de 'No hay billetes'.

Toros de 
La Quinta, noble pero a menos,  Núñez del Cuvillo, inválido, Domingo Hernández, manejable,  Victoriano del Río, descastado, El Ventorrillo, con movilidad pero sin clase, Toros de Cortés, inválido.
El Juli, silencio tras aviso y silencio. Miguel Ángel Perera, silencio y silencio.Cayetano, silencio en ambo

jueves, 13 de mayo de 2010

http://wwwlastorerias-del-chelin.blogspot.com/

TEDIOSA LA CORRIDA HOY EN SAN ISIDRO EN LA ALTERNATIVA DE JOSE MANUEL MAS



Urdiales metiendo los riñones en el saludo capotero/Foto:Cabrera
MARIO JUÁREZ | Las Ventas (Madrid)
La tarde no tuvo contenido alguno. Mas tomó la alternativa y ya es matador de toros, pero seguro que ni en sus peores pesadillas soñó hacerlo con una corrida tan podrida como la que trajo Parladé. Al menos, la corrida se lidió completa. Pero tardes así habría sido mejor el baile de corrales y que alguno de los ejemplares mortecinos diese paso a otro con algo de gracia. O de algo.
La corrida es insalvable y ninguno de los seis llegó a la muleta con algo dentro. Si acaso el cuarto, un toro muy grande y cuesta arriba que aguantó un par de series arrancándose pero echando pronto el freno. Ese toro se llamaba "Asquito". Como toda la corrida, un asco mayúsculo. Es difícil que otro encierro de la feria supere la podredumbre de los de Parladé.
Ante tal panorama, y con un frío de febrero, se puede entender que la plaza no entrase en la corrida nunca. Si la hubo, que uno ya duda que esto ya no fuese una pesadilla, lo raro es que los abonados no estallasen en casi ningún momento. Porque motivos hubo para ello.
Por ejemplo, cuando ese "Asquito" amagó una y otra vez con echarse. O cuando segundo, tercero y quinto salieron ya mortecinos del capote, parados, sin moverse. Cierto es que la corrida no se cayó, pero entre ver sobreros o ver esa podredumbre de animales, uno echa de menos a Florito.
Como no hubo material, los toreros se estrellaron contra lo imposible. Lo hizo José Manuel Mas, que había puesto ganas en este día pero que tuvo un lote para el olvido. El que abrió plaza, un toro bien hecho, se defendió ya en banderillas y llegó frenado y sin acometer a la muleta. El sexto se arrancó una vez de largo en los medios, en el primer muletazo, y a partir de ahí fue quedándose corto, sin pasar, defendiéndose y cada vez peor.
Mas lo intentó con los dos. Algo nervioso en el primero, que le pegó un golpe fortísimo en la cara a Jarocho al banderillear, alargó en exceso la cosa pese a las protestas el público. Al sexto lo llamó de largo y cuando se empezó a quedar corto, no hubo recursos ni forma de taparse que no fuese matar aquello.
Urdiales tuvo, dentro de lo malo, el toro menos infumable. Ese cuarto tuvo diez arrancadas, aunque su falta de fuerza le hizo defenderse más de una vez. Urdiales, que dejó un buen saludo de capa, comenzó al natural, lo llevó a media altura aunque el toro embistió a saltos y se acabó todo. El segundo tuvo nobleza aunque le costó siempre embestir y nunca repitió.Diego trató de sacarlos en el uno a uno, pero no llegó arriba.
El castaño tercero, que sorteó Tejela, también pareció que iba a valer. El toro se vino cuandoMatías brindaba y el alcalaíno resolvió la papeleta con cuatro muletazos genuflexo, en línea, ayudándolo. A partir de ese momento el toro, muy largo y astifino pero de cara lavada, ya no fue más. Protestón, a la defensiva, Matías se justificó muy en corto, pasando el pitón y exponiendo los muslos, aunque no había opción. El quinto no dio pie siquiera a ponerse encima, por lo que hubo de machetear. Debieron hacer lo mismo con toda la corrida.

LAS VENTAS, 13 DE MAYO

8ª de Feria de San Isidro. Casi Lleno.

Seis toros de 
Parladé, desiguales aunque correctamente presentados, salvo alguno como el tercero, astifino pero lavado de cara. Descastados y vacíos por dentro, sin una embestida.

Diego Urdiales
, silencio y silencio tras aviso.Matías Tejela, silencio en ambos.José Manuel Mas, que tomaba la alternativa, silencio en ambos.
Mas tomó la alternativa con el toro "Enjarado", de 551 kilos, negro listón.
El banderillero Jarocho fue atendido de contusión por asta de toro en el ojo derecho, de pronóstico reservado. Pendiente de estudio oftalmológico

martes, 11 de mayo de 2010

ARTURO MACIAS UN MONUMENTO AL VALOR EN SU CONFIRMACION DE ALTERNATIVA



Momento en que se queda descubierto Arturo Macías y viene la voltereta/Foto:Cabrera
MARIO JUÁREZ
La tarde era la de la confirmación de Arturo Macías. El mexicano, que había destacado en su debut español en Fallas y había pagado con sangre sus dos actuaciones, tenía ante sí la oportunidad de dar un serio toque de atención. Y no fue precisamente por falta de ganas.
El mexicano salió dispuesto a todo con el primero, un ejemplar muy gordo pero sin fuelle de Martelilla, que se dejó en los primeros tercios, al que cuidaron una barbaridad en el caballo y con el que dejó la tarjeta de presentación a través de un quite por gaoneras. Sin demasiada limpieza, quedó claro el valor y disposición del hidrocálido.
Macías planteó la faena en los medios, pese al viento, iniciándola con un par de cambiados sin moverse. Sin embargo, el Martelilla se rajó tras la primera serie, buscando tablas desesperadamente. Y allí, más cerrado, consiguió ligar un par de series llevándolo más largo, sorprendiendo incluso con algún cambio por la espada.
Tras esas dos se acabó el toro y el torero tuvo que meterse en harina, o muy encima, para robar muletazos. El valor tapó la colocación, por fuera, que más de una vez lo dejó al descubierto y le costó un par de secas volteretas. Fue más cosa de voluntad y ganas que de lucimiento, porque el toro no tenía nada.
El sexto fue un toro paletón y cariavacado al que, con la tarde vencida, no le dieron importancia. De nuevo lo cuidaron en el caballo aunque empujó en una primera vara y de nuevo hubo quite en los medios capote a la espalda. Macías se lo sacó a los medios y allí lo llamó de largo. Pero cuando lo pudo en una buena serie en redondo se acabó la gasolina. El toro comenzó a defenderse, a lanzar tornillazos y a poner las cosas complicadas. Macías tiró de nuevo la moneda y se puso muy encima, jugándosela, demasiado a merced en muchas ocasiones, paseándose por el filo de la navaja en todas ellas. La actitud pudo a la limpieza y la plaza le tocó las únicas palmas de la tarde.
El resto de la tarde fue de escandalera total. La corrida de Martelilla, marcada otros años por una presentación al límite y las fuerzas justas, cumplió el guión otra vez más. En una feria marcada por el baile de corrales, queda por ver qué le vieron los veterinarios al segundo de la tarde para pasarlo en el reconocimiento. O tenían resaca de la novillada de ayer o, directamente, están tomando el pelo. Si se ponen serios, señores, pónganse de verdad. Pero echar toros para atrás y soltar eso, no tiene explicación alguna.
Abellán Jiménez se enfrentaron a dos lotes infumables. El torillo segundo se paró a las primeras de cambio porque no tenía fuerza ni nada. El cuarto, un salpicado muy grande, debió volver a los corrales por inválido, siempre a la defensiva. Con ninguno consiguió llegar Abellán al tendido. En el primero tuvo que cortar y en el otro la faena nunca tomó vuelo entre demasiados enganchones.
Jiménez vino a matar una de Martelilla y estoqueó uno de Navalrosal y uno deDomínguez Camacho. El de Navalrosal estaba más inválido que el que devolvieron, y pese a ello el ínclito de Julio Martínez cambió de tercio con el animal despanzurrado en el ruedo. El de Camacho no anduvo sobrado pero se vino en las primeras series, de largo, y lo que aguantó por el pitón derecho dejó estar. Jiménez, que se empeñó en pegar pases al inválido, se perdió con éste en una faena larga, sin planteamiento (ahora fuera, ahora dentro, ahora de largo, ahora encima) en la que hubo demasiados enganchones y nada claro. 

LAS VENTAS, 11 DE MAYO

6ª Feria de San Isidro. Casi lleno.

Cuatro toros de 
Martelilla, un remiendo (3º) de Navalrosal y un sobrero (5º, al correrse turno) de Hermanos Domínguez Camacho. Muy desiguales de presentación, con ejemplares como el 2º impropios. Descastados y muy deslucidos, al límite de fuerzas.

Miguel Abellán
, silencio y silencio. César Jiménez, silencio y silencio.Arturo Macías, que confirmaba la alternativa, silencio tras aviso y ovación con saludos

lunes, 10 de mayo de 2010

JUAN DEL ALAMO CORTA UNA OREJA EN LA QUINTA DE FERIA DE SAN ISIDRO MADRID


El novillero salmantino Juan del Álamo ha cortado una oreja en la quinta de la Feria de San Isidro, después de un trasteo de buen trazo por el lado derecho y más irregular por el izquierdo ante un novillo de buen juego, al segundo, de Carmen Segovia. En el quinto fue volteado al entrar a matar, después de una faena larga ante un novillo pobre de presencia y deslucido. Por su parte, Tomatito Miguel de Pablo han sido silenciados con varios novillos encastados.

MADRID, 10 DE MAYO

5ª de San Isidro. Tres cuartos de entrada.

Cuatro novillos de 
Carmen Segovia, terciados e impresentables, y dos de Torres Gallego(4º y 6º), bien presentaados. 1º complicado y con genio. 2º encastado, ovacionado en el arrastre. 3º encastado. 4º encastado. 5º deslucido. 6º noble. 

Tomasito
, silencio y silencio.Juan del Álamo, oreja y saludos.Miguel de Pablo, silencio tras aviso

RAFAELILLO PIERDE LA PUERTA GRANDE Y JOSELILLO SALE HERIDO EN LA CUARTA DE SAN ISIDRO MADRID




Rafaelillo pudo cortar tres orejas en Madrid. Al final, la que paseó, a ley y con todo el peso, valió por mucho. De las otras, una se la 'birló' Muñoz Infante, que ha decidido convertirse en justiciero a su gusto y con sus gustos; y la otra se la quitó el propio torero con la espada al cuarto.
Su cara de satisfacción y triunfo contrasta con el dolor de Joselillo. El sexto, el más serio y fuerte de una muy desigual corrida de Dolores, había avisado desde el principio. Peleó con genio de manso en el caballo, derribando dos veces y saliendo suelto tres. El toro, que cortó desde salida en los capotes, no hizo sino acrecentar ese defecto a medida que avanzó la lidia. Joselillo, que no había podido lucir con el primero, se puso en los medios para citarlo y enseñarlo. El de Dolores no hizo sino buscar, rebañar, meterse y cazar. Y cazó a Joselillo de forma muy fea.
El toro se metió por dentro, lo cazó por la taleguilla y en el aire le lanzó un derrote criminal a la cabeza. Un bate de béisbol hace menos daño en un golpe así. Después, el Argelón de Dolores tuvo todavía saña como para buscarlo en el suelo y pegarle la cornada certera en la parte trasera del muslo.
Esa imagen, tan dramática y tan sobrecogedora, fue la opuesta a la feliz de Rafaelillo. El murciano, que salió a por todas desde el principio. En sus manos cayeron los dos toros que, con matices, más se dejaron de la corrida de Dolores. El primero, serio, fue un toro muy agresivo y sin clase alguna, que embistió a saltos pero tuvo la cosa de moverse, y por eso llegar arriba.
Lo aprovechó muy bien Rafaelillo, que gobernó en la lidia y después en la muleta, dominada por un viento criminal que no permitía mando alguno. Pero el murciano se puso de verdad, echó la moneda y la pata adelante, lo entendió perfecto y a base de bajar la mano, tocar y mandar, lo metió en el canasto. Los tres o cuatro de inicio por bajo fueron clave en una faena que fue creciendo y en la que hubo licencia hasta para los cambios de mano y ciertas dosis de gusto.
Una estocada perpendicular aunque arriba debió poner en sus manos la oreja que el público pidió. Pero a Muñoz Infante los pañuelos blancos se le resisten los domingos con tíos que dan la cara. No tuvo más que concederla en el cuarto, un toro manso como todos pero muy manejable, que dejó estar y tomó la muleta.
Rafaelillo lo entendió muy bien. A su aire, sin atacarlo en exceso por abajo para que no se rajase, el murciano lo cuajó en varias series en redondo muy templadas, toreándolo con verticalidad, gusto y aprovechando la inercia del viaje del toro. Y entonces, con el animal más asentado y el torero más a gusto, llegaron las licencias de cambios de mano y muletazos por bajo.
La faena creció con una serie al natural y, sobre todo, dos en redondo. La plaza se volcó con el torero, que tenía en sus manos las dos orejas, pero que él solito se encargó de mandarlas al garete con un pinchazo. Pese a todo, la oreja debió saberle a gloria, y no hay pero que valga.
Fernando Cruz apenas tuvo opciones con su lote. El segundo de Dolores, que no fue capaz de lidiar una corrida completa y que soltó algunos ejemplares que si los lidianJuan Pedro Garcigrande queman la plaza, fue un morucho. El quinto, un remiendo de Fernando Peña, tan noble como soso. Con los dos se atascó el de Chamberí. El primero de Joselillo se movió y llegó mucho arriba, aunque sin clase alguna y con violencia en sus embestidas. El de Valladolid lo lució mucho más en una faena que comenzó bien por bajo pero terminó diluida.

LAS VENTAS (MADRID), 9 DE MAYO

Madrid. 4ª de la Feria de San Isidro. Casi lleno aparente en tarde fría.

Cinto toros de 
Dolores Aguirre y un remiendo (5º) de Fernando Peña. Desiguales de presentación, 3º y 4º terciados y sin remate. Mansos todos en el caballo y sin emplearse en la muleta. Se dejó el cuarto, manejable. El 1º, con genio y sin clase, tuvo emoción. Dejó estar el 3º.
Rafaelillo, vuelta al ruedo tras aviso, oreja y silencio.Fernando Cruz, silencio y silencio tras aviso.Joselillo, silencio tras aviso en el único que mató.

sábado, 8 de mayo de 2010

SOLO SALUDOS DE UCEDA LEAL Y JAVIER CORTES EN LA TERCERA DE SAN ISIDRO



Javier Cortés se le iba la tarde de su confirmación cuando el sexto, un toro manso y rajado de Bañuelos, buscaba las tablas desesperadamente. El toricantano, que se había pegado con él en los medios y después en terrenos de cercanías en la segunda raya, atacó con todo con la espada. Precisamente, el acero le ha cerrado la Puerta Grande más de una vez, y, en una tarde tan importante para él, no quería marcharse en blanco.
Sin haberle podido pegar un pase al manso, Cortés se volcó tras la empuñadura para dejar el acero, pasase lo que pasase. Y pasó que cobró una fortísima voltereta de la que, afortunadamente, salió ileso. La plaza, que para entonces estaba abriéndose las venas en otra tarde infumable, reaccionó con categoría, poniéndose en pie y pegándole una ovación de reconocimiento al chaval.
Eso fue lo único que dejó otra tarde infumable, y ya van dos. La corrida se torció desde el primer toro. Mejor dicho, desde que al de Bañuelos, que debutaba en Madrid como ganadero, le pegaron un tironazo del que Burebano salió haciendo el pino. La costalada fue tal que el animalito, que tenía fondo y ganas de embestir, renqueó lo suyo.De ahí hasta las nueve que se arrastró al sexto, no hay nada que llevarse a la boca más que el cabreo generalizado y con razón del público. Si al bueno de Job le obligan a tragarse lo de ayer de Pereda y los escombros de hoy de Bañuelos, el pobre la crucifixión, la hoguera o lo que fuese él mismito.
Bañuelos, que destacó en Zaragoza con una buena corrida, se la pegó a lo grande en Madrid. Primero porque no consiguió que le pasasen seis toros para tomar antigüedad. Lo segundo porque el catálogo de toros infumable fue amplísimo. Desde el remiendo deOsborne que se echó a los de Bañuelos que le costó tenerse en pie. A pesar de ello, el toro con opciones cayó en manos de Javier Cortés.
Al de Getafe se le quiere en esta plaza, donde tantas veces ha acariciado la Puerta Grande que ha pinchado. Y la gente estaba con él desde que se abrió de capa para recibir al toro de la confirmación. Ese ejemplar, tan agradable como atacado de kilos, fue el de mejor condición de la tarde. El toro la tomó por bajo y quiso siempre, aunque las fuerzas no le acompañasen. Precisamente por abajo fue por donde Cortésconsiguió los momentos de verdadero interés de la faena, en una serie en redondo de planta encajada y llevándolo muy bien.
Sin embargo, después la cosa se atascó y diluyó. El toricantano, tras la mata, no terminó de arrear. El toro pedía la media distancia y llevarlo muy despacito y Cortésdejó que le enganchase muchas veces en una labor que terminó diluida como un terrón de azúcar. Pareció remontar en otro momento al natural, pero fue puro espejismo. Desde ahí hasta las almohadillas finales con las que el público mostró su enfado, no hubo nada.
Uceda no se entendió con el segundo de Osborne, un toro que se dejó hacer pero no por arriba como se empecinó el de Usera, y pasó mucho rato con el cuarto, un toro que se adormiló tras el caballo y con el que no había nada que construir.
El Capea no tuvo opciones con su lote. El primero, protestado por su presencia, llegó moribundo a la muleta. Pedro pasó mucho rato en la cara sin decir ni hacer nada, porque no había opción más que para matarlo. El quinto, directamente, se echó en la primera serie.

LAS VENTAS (MADRID), 8 DE MAYO

3ª de la Feria de San Isidro. Casi lleno.

Cuatro toros de 
Antonio Bañuelos y dos remiendos (2º y 5º) de José Luis Osborne. Desiguales de presentación, descastados y de pésimo juego en conjunto, salvo el 1º, de buen juego y el 2º, manejable.
Uceda Leal, saludos y silencio. El Capea, pitos y silencio. Javier Cortés, que confirmaba alternativa, saludos en ambos.