Recuerdo a los aficionados taurinos chotanos que la plaza de toros El Vizcaíno de Chota se rige por un REGAMENTO TAURINO aprobado en junio de 2007 y que yo sepa hasta la fecha no ha sido suspendido ni sustituido por otro.
Recuerdo a los aficionados y especialmente al Juez de lidia los siguientes artículos de dicho reglamento, que se deben respetar para que no se convierta una corrida en una charlotada, ES DECIR EN UN ESPECTÁCULO CÓMICO TAURINO O EN UNA ACTUACIÓN PÚBLICA PROTESCA Y REDÍCULA, que sería muy grave.
Artículo 59º.- Queda prohibido que los diestros o empleados que actúen en la lidia, soliciten o insinúen al público o a la Presidencia se corten orejas o rabos de los toros muertos para que sean otorgados como premio a los matadores en mérito a sus faenas,o el indulto de las reses lidiadas.
Artículo 154º.- Cuando a juicio del ganadero o su representante, algunas de las reses lidiadas merezcan ser conservadas como semental, por su bravura y condiciones zootécnicas, el ganadero o su representante podrá dirigirse a la Presidencia solicitando se le perdone la vida, lo cual le podrá ser otorgado siempre que el público lo apruebe.
Artículo 223º.- El presente reglamento regirá y será aplicable en todo su texto, inclusive al espectáculo taurino denominado “San Juan Bautista 2007”.
Chota, junio 2007
El diccionario es muy conciso al indicar lo que es bravura: Fiereza de un animal.
Pero para cualquiera que entienda un poco de tauromaquia ¿Qué es la bravura?
Es la capacidad de lucha del toro hasta la muerte, con la condición de que lo haga con entrega.
La bravura del toro consiste en embestir constantemente hasta el final, sin mostrar síntomas de fatiga. Cualquier animal salvaje si le diesen tres puyazos ¿iría a más? ¿Se arrancaría más fuerte? Esa es la cualidad que distingue el toro de otras especies. Bravura es la capacidad de acometividad con potencia, resistencia y nobleza. Va de menos a más. El hecho de acometer y de acudir al cite es lo que caracteriza al toro de lidia.
La bravura también puede definirse como el desarrollo obtenido al seleccionar la capacidad de acometer: la fiereza seleccionada y orientada hacia la nobleza. O sea, la bravura encaminada hacia la creación de belleza. O en cuanto conjunción armónica de agresividad, codicia, combatividad y nobleza.
¿Es el ganadero el que debe decidir el indulto del toro, porque él es el que sabe lo que necesita en su casa para la selección?.
No estoy de acuerdo en que el indulto dependa exclusivamente de la potestad del ganadero. Hace falta una nueva reglamentación de los indultos, con un número de puyazos mínimos: tres en plazas de primera y de segunda, y dos en plazas de tercera.
El indulto es algo beneficioso y debemos irnos acostumbrando a que se produzca, sin prodigarse, pero que se otorgue cada vez que un toro se lo merezca. Y muy importante: sea la plaza que sea, siempre que se trate de un indulto realmente merecido.
Un toro que salga alegre, que acepte el castigo del caballo con fuerza y fijeza; que sea noble, y que permita el lucimiento del torero por su nobleza y transmisión -o sea encastado y bravo- pudiera muy bien ser indultado, porque el indulto es muy importante para el ganadero.
El indulto no debe vulgarizarse. Si no, so pretexto de la selección, acabarán matándose sólo los mansos. Ahora bien, el indulto debe fomentarse razonablemente.
Una vez que la corrida salta a la plaza el público es soberano. Las cosas están bien como están. Sin embargo, un indulto es un triunfo de la Fiesta y una parte de la misma muy positiva. Que se le perdone la vida a un toro es una segunda oportunidad para el ganadero. Lo tuvo cuatro años en el cercado y no lo seleccionó de motu proprio para semental.
Es elemental saber las condiciones de un indulto, las características de un toro que se merezca salir vivo de la plaza para morir en la dehesa padreando. Sin criticar, desmejorar o estar de acuerdo y apoyar a esas comisiones taurinas que han otorgado este máximo trofeo, Es vital profundizar el eje conceptual de lo que acá planteo:
Bueno, es mi pensamiento fruto de toda una vida viendo toros y de mucho estudio de la tauromaquia.
Cordialmente.
Severiano de Cáceres Anaya.