martes, 1 de octubre de 2013

LA CASTA DE UN NIÑO ANTE LA SIN RAZON DE UNA LEY QUE VA ENCONTRA DE LA REALIDAD DE LA AUTODETERMINACION DE LAS PERSONAS

TORERO Y HOMBRE Se celebraba la 2ª corrida de toros de la Feria de Tovar, Estado Mérida, Venezuela, y ya el ambiente estaba caldeado por las ilícitas actuaciones de la Defensoría del Menor del Estado, que impedían el acceso a la plaza a los menores de edad, así como por el intento de retirar de la plaza el domingo anterior a un aspirante de la Escuela Taurina de Tovar, con la irrupción de funcionarios de orden público y la protesta enardecida de la afición, en un acto mas de la persecución a la que está sometida la Tauromaquia, en un país donde las violaciones a los derechos humanos se repiten una y otra vez. Para el sábado 14 de septiembre anunciaban la actuación de los Matadores de Toros Sebastián Vargas, de Colombia, Iván García, español y El Califa de Aragua. A última hora se acordó la participación del joven novillero venezolano Jesús Enrique Colombo, en la lidia de dos bravos novillos. Y contra toda amenaza, incluido el intento de la Defensora del Menor que se presentó a la plaza acompañada de piquetes de la Guardia Nacional, retrasando casi una hora el inicio del espectáculo, el prometedor novillero tachirense no sólo burló el acoso policial y de los funcionarios públicos, sino que actuó extraordinariamente bien cortando tres orejas a sus novillos. Esta conducta del novel espada, que apenas cuenta 15 años de edad, es un verdadero ejemplo para los que se visten de luces, que como no, son muy valientes ante los astados, pero que salvo contadas excepciones, echamos en falta a la hora de enfrentar a quienes acosan la Fiesta de los Toros. Jesús Enrique Colombo es por ahora un aspirante a figura del toreo, pero en lo que no hay duda es que es un hombre, al rebelarse valientemente contra quienes pretenden impedir que nuestros niños ejerzan su derecho constitucional a tener acceso a la cultura de su entorno. Ojalá el ejemplo de Jesús Enrique se repita en muchas figuras del toreo, que deben asumir de una vez por todas la defensa de su profesión, con la misma entereza con la que actúan en los ruedos. Vale mencionar la actitud del diestro español Iván García, quien en medio de aquella trifulca brindó su primer toro a Jesús Enrique y la solidaridad del alcalde de Tovar, quien otorgó las orejas al novillero ante la estampida de la Comisión Taurina Municipal. Williams Cárdenas Rubi

No hay comentarios: